Incluir las actividades extracurriculares en el CV es muy importante, en especial si cuentas con poca experiencia laboral. A muchas personas, sobre todo universitarios, les pasa que al salir de la academia se encuentran con un mercado laboral saturado y con requisitos apretados. Si bien cumplir con estos es fundamental, hay algo aún más clave: las habilidades, y estas se pueden trabajar mediante las actividades extracurriculares.
Si quieres que tu hoja de vida se vea más profesional, te recomendamos incluir las actividades extracurriculares: aquellos cursos que tomaste, ese seminario al que te inscribiste, etc. Esto ayudará al reclutador a ver por dónde van tus intereses y aspiraciones, además de tener en cuenta el grado de habilidad que posees en una tarea o gestión concreta. ¿No sabes cómo incluir esta información en tu hoja de vida?, te recomendamos seguir leyendo.
¿A qué llamamos actividades extracurriculares?
Suele haber mucha confusión hacia lo que consideramos que son actividades extracurriculares. Primero, hay que establecer que estas son cualquier tipo de actividad formativa realizada sin carácter obligatorio. En el colegio seguro recordarás que las actividades extracurriculares eran hacer algún deporte o participar en un club de arte. En el mundo laboral, pueden considerarse aquellas capacitaciones que buscas por iniciativa propia.
En este caso, si tu jefe te ha mandado a un seminario, no es una actividad extracurricular, sino una laboral. Sin embargo, si ese mismo seminario lo buscaste tú y te inscribiste por iniciativa propia, sin ninguna relación con tu trabajo, sí puede considerarse como una actividad extracurricular. Lo más importante es entender que este tipo de tareas te ayudan a perfilar ciertas habilidades profesionales.
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Actividades extracurriculares vs. Hobbies
Al incluir las actividades curriculares en el CV no hay que confundirlas con los hobbies. Si bien ambos se realizan siguiendo una inclinación y de manera voluntaria, las primeras son académicas y los pasatiempos no conllevan ningún grado de especialización aplicable al mundo laboral. Es diferente que, como hobby, asistas a obras de teatro, que tomar una certificación o curso en técnicas de actuación contemporáneas.
¿Notas la diferencia? Aquí te dejamos algunos puntos para que sepas distinguir entre estos dos conceptos:
- Las actividades extracurriculares requieren de un grado de profesionalismo, mientras que los hobbies no necesitan alguna competencia laboral.
- Los hobbies no significan una inversión profesional, ya que se realizan con el fin de entretenerse. En cambio, las actividades extracurriculares muchas veces son tomadas como inversiones para crecer profesionalmente.
Tipos de actividades extracurriculares
Hay múltiples tipos de actividades extracurriculares y escoger entre ellas tiene que ir de la mano con el objetivo profesional. Por ejemplo, entre las actividades extracurriculares que puedes elegir se encuentran la conformación de equipos deportivos y clubes atléticos; también el participar en la vida política, ya sea de tu centro de estudios, como del país. Asimismo, valen las actividades fomentadas por las escuelas o clubes de determinada profesión, incluso hasta hacer caminatas o voluntariado, si deseas algo más relajado.
Las actividades extracurriculares se deben incluir en el CV para nutrirlo ante el primer acercamiento a la vida laboral. No obstante, esto también se aplica si has dejado de trabajar en una época, has laborado por poco tiempo en diversos lugares o postulas a un cargo en el cual se necesita un grado de afinidad. Por ejemplo:
- Un periodista de moda no necesita una carrera en diseño de modas, pero sí ser un apasionado por este sector y tener credenciales.
- Un traductor freelance no necesita tener una licenciatura en literatura, pero sí conocimientos y afinidad hacia el mundo de los libros, la lectura, la redacción y especializarse en idiomas.
- Un presentador de deportes no necesita una carrera deportiva, pero sí estar interesado e informarse de forma continua sobre esta área, además de saber cómo cubrirla.
¿Cómo incluir las actividades extracurriculares en el CV?
Ahora que conoces qué son las actividades extracurriculares y cómo diferenciarlas de un pasatiempo, es momento de que nos centremos en cómo ponerlas en el CV. Existen varias formas de ubicar esta información para que resalte, sea entendible y se adapte a tu hoja de vida. A continuación, te las explicaremos.
Elige el tipo de currículum que harás
Para incluir las actividades extracurriculares en el CV primero tienes que elegir el tipo de hoja de vida que vas a desarrollar. Te daremos un breve recorrido por las dos principales: la cronológica y la funcional. ¿Qué significa cada una?
- Hoja de vida cronológica: Ordenada de lo más reciente a lo más antiguo. Ayuda a dar un aspecto organizado y facilita la visión de la trayectoria profesional. Quizás empezaste en una pequeña empresa, pero con el tiempo pasaste a una más grande con un cargo mayor, o fundaste tu propia compañía. Este tipo de CV es ideal para evidenciarlo.
- Hoja de vida funcional: Esta tiene que ver más con el tipo de trabajo que vas a desarrollar. Te puede servir si quieres entrar a una nueva área de especialización o si cambiaste de carrera. El objetivo es que las habilidades, competencias y experiencia sean funcionales a lo que el reclutador necesita en los candidatos.
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Escoge las actividades extracurriculares relevantes
Es posible que a muy pocas personas les interese ese curso de Excel que tomaste en 2010. En cambio, les llamará más la atención aquel seminario de Inteligencia Artificial para arquitectura al que acudiste hace tres meses. La idea es evidenciar las actividades que te hayan dejado mayores enseñanzas o que te hayan servido más para fortalecer tu trabajo, el resto incluso puedes omitirlo:
- Escoge aquellas que te han dado experiencia técnica.
- Incluye las que te ayudaron a fomentar la organización, comunicación y liderazgo.
- Agrega alguna actividad extracurricular que hayas tomado para incentivarte a ti mismo a mejorar en tu campo de trabajo.
Dónde incluir las actividades extracurriculares en el CV
Es hora de ubicarlas. Este tipo de información puede ir en dos sitios, dependiendo de cuál es tu objetivo y los requerimientos del reclutador. El primero es en la zona de educación, en la que debes nombrar la institución que avaló tu aprendizaje autónomo y las habilidades que lograste mejorar a partir de esa enseñanza.
La segunda se trata de la sección de logros, en esta parte se habla de las cosas que te hacen sentir orgulloso dentro de tu carrera. Es tu espacio para lucirte y, aunque no tengas mucha experiencia laboral, formarse siempre es un logro. No olvides vender tu imagen al reclutador en esta sección, iluminando todos los puntos positivos de tu participación.
Las actividades extracurriculares son un plus valioso
Como hemos visto, es importante incluir las actividades extracurriculares en el currículum porque muestran más allá de nuestros logros académicos. También son una gran oportunidad para destacar otras habilidades y talentos que poseemos y que quizás, en la entrevista, quedaron relegados. Ahora que sabes cómo incluirlas, ¡no dudes en hacerlo!
