Cuando un equipo pierde a algunos de sus miembros y se mantienen los plazos de entrega, estamos ante expectativas poco realistas. Lo mismo ocurre cuando te sientes presionado a trabajar durante tus vacaciones, o tienes una carga laboral tan grande que es imposible completarla y tener éxito.
Sea cual sea el caso en el que te encuentres, no te preocupes: hay una solución. Por fortuna, existen estrategias para lidiar con las expectativas no realistas en el trabajo, y reducir el estrés y la frustración que estas suelen causar. ¡Veamos!
1. Establece límites
Si te sientes abrumado por expectativas poco realistas en el trabajo, es importante establecer límites claros. Por ejemplo, si no puedes asumir un nuevo proyecto, comunícaselo a tu supervisor y trabajen juntos en una solución. Esta comunicación abierta tiene beneficios como planificar de manera más efectiva y fomentar un ambiente colaborativo.
Lee también: 7 límites y reglas que debes establecer siendo freelancer
2. Pide apoyo a tus compañeros
Algunas personas pueden sentirse incómodas al pedir ayuda por miedo a parecer incompetentes o a ser una carga para sus compañeros. Sin embargo, pedir ayuda es una señal de fortaleza, no de debilidad. Demuestra que eres consciente de tus limitaciones y que estás dispuesto a aprender y crecer.
Si te preocupa que tus compañeros te vean como alguien que no puede hacer su trabajo, recuerda que todos necesitamos ayuda en algún momento. Así mismo, esto demuestra que valoras el trabajo en equipo y estás comprometido con el éxito del proyecto.
3. Habla con tu jefe al respecto
Una reunión con tu supervisor es una excelente oportunidad para compartir tu perspectiva sobre las tareas y plazos. Si ofreces una retroalimentación honesta y respetuosa, comprenderá mejor tu situación y abrirá las puertas a encontrar una solución juntos.
4. Propón un plan realista
Cuando te enfrentes a plazos ajustados, crea un plan de trabajo detallado que incluya todas las tareas y sus respectivas duraciones. Al compartir este plan con tu supervisor, podrá visualizar juntos los posibles cuellos de botella y ajustar el alcance del proyecto si es necesario.
5. Establece prioridades y habla con tu jefe sobre ellas
Si estás trabajando en un proyecto de alta prioridad y te asignan una nueva tarea, no esperes a que surjan problemas. Acuerda una reunión con tu supervisor para discutir tus responsabilidades actuales y cómo puedes integrar la nueva tarea en tu carga de trabajo sin comprometer la calidad.
6. Reconoce los avances
Cuando tu supervisor establezca expectativas realistas, agradécele y fortalece su relación laboral. No tiene que ser nada muy complicado o formal, un simple «gracias por ser flexible con los plazos» puede hacer una gran diferencia y fomentar que repita este comportamiento en el futuro.
7. Celebra tus éxitos para mantener la motivación
Celebrar tus logros, grandes o pequeños, te ayudará a mantener la motivación y a sentirte más satisfecho con tu trabajo. Así mismo, comparte estos momentos con tu supervisor para fortalecer la relación y fomentar un ambiente de trabajo positivo.
Lidiar con expectativas no realistas, una habilidad
Aprender a manejar las expectativas no realistas es una habilidad esencial para cualquier profesional. Al desarrollar estas habilidades, no solo estarás mejor preparado para enfrentar los desafíos en tu trabajo actual, sino que también estarás fortaleciendo tu carrera a largo plazo. Recuerda que al establecer límites saludables y priorizar tu bienestar, estarás invirtiendo en tu crecimiento personal y profesional.