Cómo ajustar tu CV a cada oferta de trabajo

A estas alturas es probable que pienses que somos unos pesados porque todo el tiempo te estamos diciendo que debes ajustar tu CV a cada oferta de trabajo. Pero veamos si con el siguiente ejemplo, por fin nos das la razón.

Imagina que recibes una invitación para asistir a una fiesta en la playa con tus amigos y, en lugar de llevar un bañador o un outfit fresco y colorido, te presentas con un traje de gala. No tiene sentido, ¿cierto? Es probable que todos crean que se te ha zafado un tornillo.

Lo mismo ocurre con el currículum y la oferta de empleo. No puedes esperar que la hoja de vida para una vacante como community manager, sea la misma a la de una posición como programador backend. Así las cosas, te enseñamos cómo ajustar tu CV a cada oferta de trabajo.

1. Identifica y añade las palabras clave de cada oferta de empleo

Las ofertas laborales cuentan con palabras clave que es imperante que agregues a tu CV. Por ello, si estás aplicando a varias ofertas de empleo, es esencial que identifiques y agregues las keywords que corresponden a cada una. Esto, además, te permitirá superar los ATS. Sí, esos programillas que utilizan los reclutadores para filtrar las hojas de vida, y que te pueden dejar fuera de competencia en un santiamén.

¡Ajá! ¿Y cómo identifico estas palabras claves? Te podría servir echarle un vistazo a lo siguiente:

• Nombre del puesto o profesión. Por ejemplo, diseñador UX.
• Sector profesional. Por ejemplo, diseño.
• Competencias o habilidades. Por ejemplo, diseño de interfaces, diseño de productos, diseño de íconos.

Lee también: 33 verbos de acción importantes para mejorar tu CV

2. Coloca, en el título del currículum, el nombre del puesto al que estás optando

Si nunca habías oído hablar del título del currículum, déjanos decirte que se trata de esa frase o línea que colocas debajo de tu nombre para describir tu perfil profesional. Por ejemplo, “Diseñador gráfico con 10 años de experiencia” o “Periodista digital especializado en política y relaciones internacionales”.

Una vez ha quedado claro, procura que el título de tu hoja de vida sea similar al de la oferta de trabajo. Eso sí, considera que para esto, la vacante debe estar muy relacionada con tu perfil, de otro modo, podría verse como que estás intentando ser algo que no eres.

3. Solo agrega las experiencias relevantes para el puesto al que aplicas

En las ofertas laborales se suelen especificar las tareas y funciones que debe realizar la persona. Así las cosas, intenta que las experiencias que añadas a la hoja de vida sean las que más se relacionan con las señaladas en la oferta. No tienes que mentir, ya que si la vacante está asociada a tu industria, es probable que hayas tenido algún trabajo en el que cumplieras con ese tipo de responsabilidades.

4. ¡No olvides las habilidades!

Si en la oferta están buscando a una persona con “conocimientos en backend” y “buen dominio de lógica de programación”, es un hecho que debes incluir estas habilidades, siempre y cuando las tengas, o puedas adquirirlas en un tiempo corto.

Esto se aplica a todas las vacantes a las que te postules, ya que para cada una es probable que existan habilidades, tanto blandas como duras, especializadas. Una lista de competencias generales no te llevará a ningún lado. Créenos, los ATS no te lo permitirán.

5. Menciona si tienes experiencia en la modalidad de trabajo solicitada

Otra “palabra clave” o información de interés para el reclutador es si tienes experiencia en la modalidad de trabajo que indican en la oferta. Esta puede ser freelance, part-time o full-time. Asegúrate de especificarlo cuando vayas a ajustar tu CV a cada oferta de trabajo. No querrás que le llegue a una empresa que solicita un puesto part-time, un correo en el que destacas únicamente tu experiencia como autónomo.

Descubre: Formación complementaria en el CV, ¿cómo agregarla?

Estos son los detalles más importantes cuando de ajustar un CV se trata. Sin embargo, también considera que, si bien es cierto que debes agregar las palabras claves, tu hoja de vida no debe ser un “copiar y pegar” de la oferta. Así mismo, el diseño juega un papel fundamental. Procura que siga las tendencias del sector y (¿por qué no?), que se ajuste a la imagen de la empresa.