¡Recibir a un nuevo empleado! La mayoría de nosotros hemos estado en los zapatos del novato. ¿Lo recuerdas? Los nervios, las dudas, la expectativa, lo embarazoso de integrarse en un equipo de trabajo que ya está consolidado. Disminuir los sentimientos de inquietud del nuevo y hacerlo sentir de forma inmediata parte de la familia, no lo beneficia solo a él, sino a la empresa también.
Cuando un jefe sabe dar la bienvenida al nuevo trabajador, es una estrategia inteligente, cuyo resultado es sentido de pertenencia, mayor productividad y una retención más prolongada. Aquí unos tips a tomar en cuenta para darle la bienvenida a un nuevo trabajador.
1. Prepara un recorrido especial por la oficina
Hazlo sentirse como en casa desde el primer día. Muéstrale dónde se encuentran las impresoras y fotocopiadoras, pero también el lugar preferido por los colegas para charlar durante el almuerzo, o el espacio que sirve para tomar un poco de aire y pensar.
Además, háblale con anticipación al equipo sobre el nuevo colega y el día en el que se incorporará. De este modo, estarán atentos a su llegada, y no verán con extrañeza el recorrido, sino que pueden contribuir a hacerlo más especial.
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2. Preséntalo y ayúdalo a reconocer a sus compañeros
Es normal que el nuevo miembro, al principio, sienta que no forma parte del grupo, ya que todos en la oficina se conocen y comparten muchas cosas. Sin embargo, está en tus manos ayudarlo a sentirse bienvenido y cómodo.
Además de presentarlo frente a los colegas, puedes darle una pequeña descripción de cada uno de estos, nombre, cargo e incluso un rasgo por el que sea bien conocido entre los miembros del equipo. Así, le será un poco más fácil recordar.
3. Acondiciona su espacio de trabajo con antelación
No hay mejor forma de recibir a un nuevo empleado, que presentarle su espacio de trabajo limpio, organizado y abastecido con lo que necesita. Además de mostrarle dónde puede obtener más suministros de ser necesario. Esto, entre otras cosas, hará que se sienta que puede ser productivo desde el primer día.
4. No tardes en asignar algunas tareas
Si hay algo que caracteriza a los nuevos talentos, son las ganas de demostrar su valía ante la empresa. Por ello, comienza la primera semana con algunas tareas ligeras. Estas, además de hacerlos sentir que han logrado algo, les dan tiempo para adaptarse, digerir todo lo que está sucediendo y prepararse para lo que viene.
5. Sé paciente
Si bien es cierto que debes ser paciente con todos los trabajadores, es necesario serlo un poco más con los nuevos. En especial, cuando se trata de su primer empleo, ya que es normal que cometan errores con más frecuencia y le surjan un montón de dudas con respecto al trabajo.
En ese sentido, y teniendo en cuenta que eres una de las primeras personas con las que tuvieron contacto en la empresa, es normal que acudan a ti, y lo mejor es que los atiendas con la mejor de las disposiciones. Así, tú también estarás ganando, ya que su estima y confianza se verán reflejados en su desempeño.
6. Invítalo a almorzar
Un almuerzo es perfecto para salir un poco de la formalidad de la oficina, y entablar una conversación en la que puedas conocer un poco más sobre la familia, los intereses y pasatiempos del nuevo empleado. Así mismo, es una excelente oportunidad para mostrarle algunas de las opciones de la zona para tomar el almuerzo.
7. Designa un mentor
Aunque esto puede ser difícil en una empresa pequeña, los mentores tienen un gran impacto en el desempeño de los nuevos colegas. Para que este recurso funcione, encomienda esta tarea a un colega con experiencia, que además de capacitar, pueda servir como un apoyo para el nuevo miembro del equipo.
8. Hazlo sentir parte de la comunidad
Cuanto más cercano a la empresa se sienta el nuevo trabajador, más ánimo tendrá para darlo todo de sí en sus tareas. En los primeros días, hay algunas acciones que no debes pasar por alto si quieres que se sienta parte de la comunidad. Invítalo a los grupos de redes sociales de la empresa, canales de Slack y próximos eventos.
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Otra forma de recibir a un nuevo empleado es prepararle un regalo. Ya sea una taza de café, una memoria USB e incluso una planta. Esto lo hará sentir especial, lo que finalmente se convertirá en un trabajador fidelizado y, por ende, más comprometido con la empresa.
