Cuando un reclutador te llama para decirte que está interesado en tu perfil, es normal sentir una montaña rusa de emociones. Por un lado, alegría y sensación de logro por la posibilidad de tener un nuevo trabajo, mientras que por otro, ansiedad y miedo por la temida entrevista laboral.
¿Qué te van a preguntar? ¿Que pasa si todo sale mal? Tu mente comienza a explorar los rincones más oscuros de tu imaginación y a pensar en los peores escenarios. En esta ocasión te traemos algunas recomendaciones para que salgas de esa situación y te prepares para capturar la atención de tu entrevistador y domines tus nervios.
1. Investiga sobre la empresa y el puesto
Haz una breve búsqueda en Internet sobre la trayectoria de la empresa, sus valores y objetivos. Esto demostrará interés y capacidad de investigación ante tu entrevistador. Además, te ayudará a encaminar mejor tus respuestas para relacionarlas con lo que ellos hacen o buscan.
También es importante que tengas claro lo que solicitan en el puesto vacante, así podrás identificar en cuál de tus habilidades podrían estar más interesados para destacarla en la entrevista.
2. Practica
Pídele a alguno de tus amigos que se ponga en el papel del entrevistador y te haga preguntas. Incluso puedes ensayar frente al espejo o solo repasar en tu mente qué dirás y responderás en la reunión.
Piensa en tus objetivos profesionales, en las dudas que tienes sobre el puesto, en tus mayores logros y en todo lo que consideras que tu futuro empleador debe saber de ti. Incluso es bueno que te prepares para sobrellevar un silencio incómodo, pues lo más probable es que te enfrentes a alguno.
3. Llega con tiempo
Si tu entrevista es presencial, planea cuál será tu ruta para llegar y contempla el tiempo que te tomará (puedes utilizar Google Maps para identificar esto si no conoces el lugar). Sal con anticipación, pues si hay algo peor que llegar con nervios a una entrevista es sumarle los nervios por llegar tarde.
Si tu entrevista es en línea, ¡no te confíes! Prende tu computadora con anticipación, prueba tu micrófono y cámara, y entra al enlace que te hayan enviado algunos minutos antes para comprobar que funciona. Asegúrate de que el fondo de donde tomes la reunión esté despejado y ten a la mano tus notas. Lo importante es que te sientas listo, para que mantengas los nervios y la ansiedad a raya durante la entrevista.
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4. Confía en ti
Esto es fundamental. Si confías en tus habilidades y en que eres el candidato ideal para ese puesto, será más sencillo transmitirlo a tu entrevistador. Esta es una de las razones por la que es importante no mentir en tu currículum, pues podría angustiarte que te descubran en la mentira.
5. Quítale importancia
No estamos promoviendo que no te tomes en serio la entrevista ni que seas irresponsable. Lo que creemos es que una de las razones por las que da ansiedad en una entrevista laboral es porque le damos un valor muy grande y nuestra mente decide que es un momento crucial en la vida y se imagina los peores escenarios.
Claro que es importante, necesitas trabajar y seguramente este trabajo te ilusiona mucho. Sin embargo, lo peor que puede suceder es que no te quedes, lo cual en realidad no es tan malo, ¿no? Existen muchas más oportunidades, así que recuérdate esto para que tu mente se calme y sepa que no está en peligro realmente.
6. Sé tú mismo
Este consejo es fundamental en todos los ámbitos de la vida. Demuestra autenticidad y conseguirás la empatía de tu interlocutor. Piensa en la entrevista como si fuera una plática con un amigo en la que quieres contarle sobre tus habilidades y lo que puedes ayudarle a lograr en su empresa. No intentes mostrarte como alguien que no eres porque será más difícil para ti llevar la conversación y sostener una imagen con la que no te identificas.
7. No intentes ocultar tus nervios
Si te concentras en que no se note cómo te sientes, tu nerviosismo aumentará, ya que no solo será la ansiedad por la entrevista laboral sino también por disimularla. ¡No te preocupes! El entrevistador sabe que estás nervioso (quizá también él lo esté), lo que importa aquí es que vea que sabes manejarlo y que no afecta tu desempeño.
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Recuerda que no es malo sentir nervios, es parte del proceso. Y es también una oportunidad para demostrarte y demostrarle a tu entrevistador que sabes lidiar con las dificultades y que la ansiedad por una entrevista laboral no te paraliza.
Muy útil. Me encanta
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