¿Sabías que hay casos donde los procesos de selección de personal no se definen por la experiencia ni por las competencias técnicas, sino por el resultado de la entrevista conductual? Así es. Muchos reclutadores y empresas valoran habilidades que, en apariencia, tienen poco que ver con las funciones del cargo y, por ello, se enfocan en conocer los comportamientos de los candidatos, los cuales se conocen en este tipo de entrevista.
Una entrevista conductual busca descubrir si el candidato se adaptará al ambiente laboral y al ritmo de trabajo, si encajará en la cultura organizacional, cuál es su actitud frente a las dificultades y cómo resuelve conflictos, entre otras inquietudes similares. Aquí, te damos algunas ideas para que puedas prepararte para superar esta prueba en tu búsqueda de empleo.
¿Qué es una entrevista conductual?
Para preparar una entrevista conductual, lo primero es entender qué es. Se trata de una técnica de selección de personal basada en la premisa de que la mejor manera de predecir el comportamiento futuro de una persona es examinando su comportamiento pasado. Por lo cual se enfoca en indagar cómo abordó el candidato situaciones laborales anteriores.
En el desarrollo de una entrevista conductual, los entrevistadores formulan preguntas específicas que piden a los candidatos relatar experiencias pasadas. En consecuencia, no preguntará sobre casos hipotéticos o ficticios, sino sobre experiencia reales vividas por el candidato.
Por ejemplo, en lugar de preguntar “¿Cómo reaccionaría ante un caso de injusticia en la empresa?”, el asunto se abordaría de manera más directa. Así: “Cuéntanos de alguna situación en la que hayas presenciado una injusticia en el lugar de trabajo y cómo actuaste”.
Se espera que los entrevistados respondan narrando casos concretos y detalles de las situaciones, demostrando cómo pusieron en práctica habilidades que pueden ser clave para el trabajo, como liderazgo, capacidad para trabajar en equipo, resolución de problemas, adaptabilidad, u otras.
Las preguntas con este enfoque pueden hacer parte de una entrevista laboral integral o realizarse a modo de una prueba independiente. De cualquier forma, el entrevistador estará buscando patrones de comportamiento y habilidades relevantes para la vacante en cuestión.
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Dos pasos para superar una entrevista conductual
Una entrevista conductual puede ser estresante, ya que revela aspectos de la personalidad que suelen ser impulsivos o ligados a valores y creencias. Además, confronta al candidato con su pasado, lo cual puede ser difícil de procesar en medio de la conversación. Por eso la importancia de prepararse.
Por suerte, esa preparación es más simple de lo que muchos imaginan y consta de solo dos pasos:
1. Refresca tu memoria
Nunca sabrás qué te preguntarán con anterioridad, pero como sabes hacia donde irá orientada la entrevista puedes evitar que te tomen por sorpresa. Para ello, refresca tu memoria y haz un listado de situaciones complejas o críticas que hayas tenido que sortear en otros trabajos. Si no tienes experiencia, piensa en casos ocurridos en otras áreas de tu vida.
Una vez tengas el listado, comienza a recordar detalles sobre lo que pasó, cómo y por qué ocurrieron las cosas y, sobre todo, cómo reaccionaste o resolviste el caso. Con este ejercicio evitarás que tu mente quede en blanco, o si los nervios te traicionan, lograrás retomar el curso de tu respuesta con rapidez.
Para darle foco a tu lista y conseguir historias que en efecto te ayuden a superar la prueba, piensa en experiencias en las cuales puedas encontrar relación con las habilidades o competencias requeridas en la vacante.
2. Practica
Es importante que practiques tus respuestas por dos razones:
- Manejo del tiempo: pese a lo valioso de los detalles, debes evitar que tu relato se alargue. Procura ir a grano.
- Calidad de la respuesta: al practicar, podrás identificar si en efecto tu respuesta comunica lo que quieres comunicar.
En este punto te recomendamos que apliques la técnica de respuesta STAR (por su sigla en inglés), para dar una respuesta estructurada y completa. Esta técnica consiste en:
- S – Situación: habla sobre el contexto en el que ocurrió la experiencia que quieres compartir. Proporciona detalles sobre el lugar, el tiempo y los participantes involucrados.
- T – Tarea: explica la tarea que debías realizar en esa situación particular o qué se esperaba de ti y cuál era el desafío que enfrentabas.
- A – Acción: cuenta qué acciones específicas ejecutaste para abordar la situación y cumplir con la tarea. En esta parte, es importante destacar tus habilidades, decisiones y acciones concretas.
- R – Resultado: habla sobre el resultado de la situación. Es conveniente demostrar los logros obtenidos y cómo tus acciones contribuyeron a un resultado positivo. Si no es ese el caso, menciona los aprendizajes que surgieron.
Consejos adicionales
No está demás darte unos consejos adicionales para superar la entrevista conductual:
- Habla con propiedad y seguridad. Si necesitas un minuto para tomar aire, pídelo y luego habla.
- Entre más historias puedas preparar, más probabilidades tendrás de tener la respuesta ideal.
- Lee detenidamente la oferta, para identificar habilidades o competencias que puedas asociar en tus relatos.
- Prepara también una lista de tus logros, es una forma de visualizar situaciones laborales dignas de mencionar en una entrevista.
- Sé honesto. Eso habla bien de ti.
- Haz preguntas, si lo consideras necesario.
Ejemplos de preguntas frecuentes en una entrevista conductual
Como mencionamos antes, estas preguntas son más directas y específicas que las de una entrevista tradicional. Estos ejemplos te darán una idea de lo que debes esperar:
- Danos un ejemplo de una situación que haya requerido que usaras la lógica para solucionar un problema.
- Menciona un logro profesional y cómo lo conseguiste.
- Cuéntanos sobre un momento en el que hayas tomado una decisión impopular y cómo manejaste las consecuencias.
- ¿Cómo reaccionas cuando te cambian la agenda o hay cambios en la planeación? Da un ejemplo real.
- ¿Has tenido que convencer a colegas o superiores de adoptar tus ideas? ¿Lo has conseguido? ¿Cómo?
- ¿Has tenido relaciones conflictivas con algún colega? ¿Cómo lo manejaste?
- ¿Cuál ha sido el aprendizaje que más te ha impactado en el trabajo y cómo los has puesto en práctica?
- ¿Has sido disruptivo en alguna situación laboral? ¿Cuál fue el resultado?
¡Que el nombre de la prueba no te intimide!
Una entrevista conductual, en la práctica, es igual que cualquier otra entrevista laboral. De modo, que no debe intimidar más de lo normal. Además, al igual que en todas las partes del proceso de selección, la clave para superarlo con éxito es con la preparación.
Los ejemplos y explicaciones que hemos dado arriba son un insumo que te ayudará en esa preparación. Además, piensa que el hecho de que las respuestas se basen en anécdotas es una ventaja que facilita la comunicación y que, si buscas bien en tus recuerdos, podrás responder con coherencia y naturalidad muchas de las preguntas que surjan.
Lo que queremos decir es que si te tomas el tiempo de prepararte, es muy probable que lo hagas bien. Además, no hay respuestas buenas ni malas. La claridad y honestidad de tus relatos son lo que conseguirá ganar puntos con el reclutador, si tus comportamientos son acordes a la nueva empresa. Si no lo son, esa vacante no era para ti. No te juzgues ni te preocupes. Mejor preocúpate por ser auténtico, así encontrarás tu lugar ideal para trabajar y seguro la entrevista conductual te parecerá demasiado fácil de superar.