La sensación de querer alcanzar el éxito y no poder lograrlo puede ser abrumadora. Aunque no existe “el secreto del éxito”, hay algunos hábitos para alcanzarlo que tienen explicaciones científicas y que poniéndolos en práctica podrían ayudarnos a tener un mejor rendimiento profesional.
Claro que no es fácil llevar a la práctica todos. Todos somos diferentes y lo que es fácil para unos puede ser difícil para otros. Lo mismo sucede con la eficacia de estos hábitos, para unos es muy difícil meditar y sentir que esto generó un beneficio, pero les es fundamental hacer una lista de tareas cuando tienen muchas cosas para hacer.
Sin embargo, para otras personas es fundamental comenzar el día meditando y las listas no le servirán para nada. Veamos cuáles son algunos de los hábitos para alcanzar el éxito profesional.
1. Meditar
Para muchas personas meditar no solo es eficaz, sino necesario. Según Mayo Clinic, algunos de los beneficios de la meditación son manejar mejor el estrés, mejorar la concentración y ayudar a estar más calmado.
Existen distintas maneras de meditar y es importante encontrar la que mejor se adapte a ti. Una de las alternativas es escuchar música y practicar una respiración consciente. Otras son la repetición de mantras y la práctica del mindfulness, que intenta que podamos concentrarnos en el aquí y el ahora.
Para algo más activo, el yoga también puede traer muchos beneficios tanto a nivel físico como mental.
2. Tener mentalidad de crecimiento
Expextos aseguran que existe una fuerza que empuja a aquellos que piensan que pueden mejorar y que toman acciones para lograrlo. Esto significa no creer que las habilidades y conocimientos que tenemos están dados y son fijos. Por el contrario, hay que pensar que podemos desarrollar nuestras habilidades. Una vez que entendemos esto tenemos que pensar qué habilidades queremos mejorar y establecer un plan para saber cómo vamos a hacerlo.
Con esta nueva forma de pensar encararemos nuestros proyectos con mayor positividad y motivación. Así que uno de los hábitos para alcanzar el éxito profesional es pensar que es posible crecer.
Te comparto 7 recomendaciones para pedir un aumento de sueldo.
3. Vivir con coraje y pasión
El éxito no se alcanza solo si eres el mejor, a veces se logra cuando sientes pasión por algo y eres perseverante para cumplir con el objetivo. Un ejemplo del que se escuchan muchas historias se da en el fútbol, donde no siempre llegan a jugar en primera división los mejores.
En ocasiones, alguien que era muy bueno de chico, en realidad no estaba motivado o no tuvo el apoyo necesario y siendo adolescente desistió o se cansó. Mientras que alguien que a lo mejor no era tan bueno, pero amaba jugar y tuvo el apoyo necesario para seguir intentándolo, logró su objetivo y se convirtió en jugador profesional. Por eso es importante encontrar lo que te apasiona, porque tendrás más coraje y ganas de esforzarte cuando crees en lo que estás haciendo.
4. Dormir bien, uno de los hábitos más importantes para alcanzar el éxito
Cuando dormimos mal o poco, el cerebro sufre las consecuencias. Cuesta más concentrarse y disminuye el rendimiento mental. Por ello, aunque tengas mucho trabajo atrasado, si sientes sueño, es mejor que te vayas a dormir y retomes las tareas al día siguiente. Te vas a sentir renovado y serás más productivo.
5. Enfocarse en el proceso y no solo en los resultados
Es importante aprender a disfrutar de los pequeños logros y no solo pensar que es importante llegar a la meta final. Sin duda que este es uno de los hábitos para alcanzar el éxito profesional.
Cuando aprendemos algo nuevo, cuando resolvemos un problema o alcanzamos un objetivo parcial, el cuerpo recibe mayores niveles de dopamina. Esto incrementa los niveles de motivación y nos da energía para seguir trabajando y tratando de lograr más objetivos. Así que si solo estás disfrutando cuando terminas de hacer el trabajo, es probble que no te estés dedicando a lo que deberías.
6. Trabajar sobre tu confianza
Cuando confías en ti mismo, te sientes cómodo con lo que eres, sean fortalezas o debilidades. Eso ayuda a mantener a raya las dudas sobre uno mismo, entonces es más fácil concentrarse en el trabajo.
El punto clave a tener en cuenta aquí es que la confianza no se debería construir solo de la aprobación de los demás. Debes desarrollar tu propio sentido de autoestima y asegurarte de que lo que haces está alineado con tus propias expectativas.
Si estás teniendo problemas de confianza, te recomiendo que leas este artículo sobre los miedos más comunes en el trabajo y cómo superarlos.
7. Visualizar tu éxito
Puedes hacerlo de dos formas, depende qué resulta mejor para ti. La primera es cerrando los ojos e imaginando qué quieres lograr. La segunda es escribiéndolo en un papel. Es importante que seas detallista y describas cuál es tu objetivo.
¿Cuál es la lógica detrás de esto que resulta difícil de creer? Se supone que de esta forma la información pasa del lado consciente del cerebro al subconsciente. El subconsciente quiere creer en la información que recibe, ya sea positiva o negativa, y hará lo que sea necesario para convertir las ordenes en realidad. Esta es una técnica muy utilizada por deportistas de elite.
8. Leer un libro
Leer tiene muchos beneficios. Además de aumentar tu inteligencia, proporciona herramientas para entender y empatizar con otras personas. También está comprobado que reduce el riesgo de padecer Alzheimer, ayuda a estar calmado y hacerlo antes de dormir, facilita conciliar el sueño y tener un mejor descanso.
No necesitas tener mucho tiempo libre para leer. Alcanza con que leas un par de páginas por día. Lo importante es construir el hábito.
9. Escribir a diario
La escritura te abre el camino de la creatividad. Otros beneficios que trae escribir a diario es que mejora tu capacidad de comunicación y te ayuda a recordar las cosas importantes.
Un buen hábito para alcanzar el éxito profesional entonces puede ser escribir un diario. Algunos prefieren escribir en la noche antes de ir a dormir, mientras que a otros les sirve escribir unos minutos cada mañana, antes de comenzar a trabajar. Puedes escribir lo que quieras. Una opción es escribir sobre lo que quieres lograr ese día o tus sueños y metas.
Una técnica muy recomendable es escribir listas de ideas y proyectos. Esto te hace ejercitar el cerebro y desarrollar la creatividad. No importa si son grandes (cómo salvar el mundo) o pequeñas (cómo hacer para que tu café no se enfríe tan rápido), lo importante es buscar nuevas ideas para resolver distintas situaciones. Y si tienes una buena, podría servirle a muchas más personas, y ahí estará tu idea del millón de dólares.
10. Hacer una lista de qué hacer en el día
Hablando de listas, otro de los hábitos para alcanzar el éxito es hacer listas con las tareas que debes hacer durante el día.
Este hábito trae algunos beneficios. El primero es que te ayuda a planificar tu día. Otro de los beneficios es que sabiendo cuáles tareas debes hacer estarás más enfocado, y no estarás dando vueltas y postergando cosas importantes por no saber qué es lo que tienes que hacer.
Es importante que la lista de tareas sea pequeña, así sentirás que puedes cumplir con todo y no te sentirás abrumado por todo lo que tienes que hacer. Puedes hacerla en un cuaderno o en alguna aplicación del celular. O incluso en un papel del tipo post-it, que por su tamaño te obligará a incluir pocas tareas.
11. Tomar descansos durante el día
Tomar pequeños descansos durante el día va a ayudarte a evitar el síndrome de burnout. Además, permite mantener la concentración y evitar el aburrimiento.
Hay distintas técnicas y recomendaciones. Algunos aconsejan tomarse 5 minutos de descanso cada 25 minutos de trabajo y 15 minutos de descanso cada 4 ciclos como los anteriores. Otros dirán que es mejor 10 minutos cada una hora. Lo importante es que encuentres lo que mejor se adapta a tus energías y trabajo, pero que sea como sea descanses. Una vez que defines cuál es la mejor técnica para ti, incorporala como una rutina y un hábito dentro de tu trabajo.
También puede variar lo que hagas durante el descanso. Caminar, prepararte un café, escuchar música, hablar con alguien de un tema que no tenga que ver con el trabajo o dormir una siesta corta. Existen estudios que demuestran que una siesta de entre 20 y 30 minutos puede mejorar el humor, permite estar más alerta e incrementa tu rendimiento.
12. Tomar menos decisiones
A lo largo de un día tomamos miles de pequeñas decisiones, la mayoría son tan automáticas que no nos damos cuenta que tuvimos que decidir. Pero al pasar el tiempo se nos acumulan tantas decisiones que empezamos a no prestarle atención a las que son importantes.
Los científicos demostraron que tomar muchas decisiones disminuye la resistencia física, provoca una menor persistencia frente al fracaso, aumenta la procrastinación y reduce capacidad para realizar cálculos aritméticos. Así que podemos concluir que al reducir la cantidad de elecciones que tienes que hacer cada día, puedes limitar estos efectos negativos de la “fatiga de decisión”, como se conoce a este fenómeno.
Tal vez alguna vez leíste que Mark Zuckerberg se viste igual todos los días. Su explicación es simple, sabiendo cómo se va a vestir evita tener que tomar una decisión a diario. ¿Qué decisiones podrías evitar?
13. Concentrarse en una tarea a la vez
El famoso multitasking, que en algún momento comenzó a verse como una habilidad que debían tener los empleados, en realidad no es algo positivo.
Un estudio realizado por la Universidad de Stanford descubrió que el multitasking te hace menos productivo de lo que serías si hicieras una sola tarea a la vez. Además, la investigación encontró que las personas que realizan varias tareas a la vez no pueden prestar atención, recordar información o cambiar de tareas con la misma rapidez y eficacia que alguien que termina un trabajo antes de comenzar otro.
Hay muchos más hábitos que podríamos recomendarte pero, como leímos, es importante que las listas que hagamos no sean demasiado grandes y que nos enfoquemos en lo que es manejable. Esperamos que puedas poner en práctica la mayoría de estos hábitos para alcanzar el éxito, y que sientas el cambio.