¿Puedo comunicar mi desinterés o mi entusiasmo solo con la forma en que me ven a través de la pantalla? Así es, sí puedes. Al igual que en la comunicación presencial, en una entrevista virtual tu lenguaje corporal envía mensajes a tus interlocutores.
Muchos reclutadores prefieren las entrevistas en persona porque evidencian mucho más la corporalidad que cuenta tanto sobre el candidato. No obstante, las empresas aprovechan la tecnología cada vez más para desarrollar de manera más eficiente estos procesos. Y es posible que el entrevistador esté muy atento a todo lo que expresas sin hablar a través de la pantalla.
Quizás pensabas que ese era un motivo menos de estrés. Ya era suficiente tener que preparar la entrevista y anticipar todos los asuntos técnicos: pensar en qué lugar ubicarte, rogar para que la conexión de internet no falle, lograr que la iluminación sea la ideal, que el micrófono funciones, y más. Sin embargo, sí es importante prepararte para cuidar tu lenguaje corporal.
Bueno, estamos acá para alivianar un poco esa presión que puedes sentir al percatarte de que estarán observándote. Te daremos unos consejos fáciles de apropiar, pero comenzaremos por decir que, al igual que en una entrevista presencial, todo se resumen en expresar seguridad, confianza y entusiasmo.
Acompaña tu saludo con un gesto
Tu primera impresión en una entrevista virtual comienza con el saludo. Un simple “Hola” se quedará corto para conectar con la otra persona. Acompañar tus palabras con una sonrisa o un gesto de saludo con la mano, expresaras cercanía, amabilidad y seguridad. Además, comenzarán la conversación con buena energía.
Cuida tu postura
Sentarte erguido es la mejor recomendación, pero no por eso debes perder naturalidad y expresividad. No se trata de eso. Debes encontrar una postura recta, en la que te sientas cómodo, y al mismo tiempo reflejes disposición de escucha e interés.
Busca una posición neutra, de frente a la cámara y sin recostarte sobre el escritorio o encorvarte. Recuerda que una postura recta refleja seguridad y respeto, mientras una posición agachada refleja timidez e inseguridad.
Haz contacto visual
¿Contacto visual? ¿En la pantalla? Sí. Aunque parezca difícil, lo único que debes hacer es dirigir tu mirada a la cámara y no a la pantalla, en especial cuando seas quien habla. Desde la perspectiva de tu interlocutor, parecerá que lo estás mirando. El contacto visual genera una conexión que lleva el mensaje de manera más contundente a quién escucha.
Si estás escuchando, mira el monitor y si hay varias personas en la sala mueve tu mirada por todos ellos.
Lee también: 33 palabras de liderazgo para usar en tu currículum
Mueve las manos, pero no demasiado
El movimiento de las manos es un recurso importante del lenguaje corporal en una entrevista virtual. Ayuda a hacer énfasis en lo que se quiere comunicar, connota transparencia y da dinamismo a tu imagen en la pantalla. Sin embargo, recomendamos tener un control sobre esos movimientos para no enviar un mensaje de ansiedad o distraer con el manoteo.
Practica frente al espejo, y analiza bien cómo lo haces. Ten en cuenta sentarte a una buena distancia suficientes para que se vena tus brazos y puedas moverte con tranquilidad, pero tampoco tanta que te veas pequeño y distante.
No cruces los brazos
Cuando cruzas los brazos frente a un interlocutor, de inmediato envías un mensaje de rechazo, una señal de que estás bloqueando la conversación. La más seguro es que eso no sea lo que quieres proyectar. Por eso, este es uno de los aspecto más importantes del lenguaje corporal en una entrevista virtual.
Deja que tus brazos caigan en los reposa brazos de tu silla o sobre tus piernas. Si te cuesta, trata de tomar notas o sujetar algún objeto, un làpiz, por ejemplo.
Busca un equilibrio natural en tus expresiones faciales
Algunas personas pueden ser víctimas de sus nervios: bien porque su rostro se pone tenso, les cuesta sonreír o expresarse con ayuda de gestos, o bien porque no logran controlar sus expresiones y evidencian todo sin filtro. De nuevo, vale la pena pararte frente al espejo o hacer una grabación donde puedas ver los gestos que haces al hablar.
Identifica donde exageras o donde te falta expresividad; abres muchos los ojos o la boca, no asientes, parpadeas mucho o no parpadeas, sacas la lengua, arrugas la frente, tienes la mirada perdida…
Todo eso se puede revisar. Asimismo, durante la entrevista, cuida tus gestos mientras escuchas y autorregula tus expresiones faciales para verte tranquilo y natural.
Usa a tu favor tu lenguaje corporal en una entrevista virtual
Ya sabes que parte de tu preparación para tus futuras entrevistas virtuales es analizar tu lenguaje corporal. Esto, en parte, tiene que ver con conocerte, entender cuándo haces mala cara, cuando exageras una sonrisa, si eres muy tenso, o si gesticulas tanto que hasta has tirado las cosas a tu alrededor (sin querer) mientras hablas.
Trata de revisarte de manera constante durante la entrevista para asegurarte de no contradecir con tu mirada, lo que expresan tus palabras. Lo menos que quieres es enviar una señal equivocada.
Tener presentes estos consejos te ayudará a estar más consciente de tu lenguaje corporal durante una entrevista virtual y también en otros escenarios. Saca todo el potencial de tus habilidades comunicativas, reforzando tu lenguaje verbal con lo que puedes decir sin hablar. No dejes que que tu cuerpo te haga equivocar; por el contrario, haz que respalde los mensajes que quieres dar.