Imagina que terminas la jornada laboral y anotas en tu libreta, como todos los días, los puntos que debes abordar a la mañana siguiente. Luego, apagas el computador, caminas a la sala y te llega a la mente la última conversación que tuviste por WhatsApp con tus compañeros sobre una posible reducción de personal en la compañía. Te sientes agobiado y tienes miedo a perder tu trabajo, ya que eres el responsable de cubrir la mayor parte de los gastos en tu hogar.
Tratas de distraerte viendo una película, pero te cuesta concentrarte. Sigues pensando en la posibilidad de que tu jefe te convoque a una reunión, en el momento menos esperado, para comunicarte que han decidido prescindir de tus servicios. Y te preguntas en silencio, ¿qué debo hacer? ¿Cómo puedo descansar si es probable que me quede sin empleo?
Si esta situación te parece familiar, estás sufriendo de miedo a perder tu trabajo. Todos en algún momento de nuestra vida laboral hemos pasado por este temor y hay maneras de sobrellevarlo, para que no interfiera en tu vida diaria y salud. Acompáñanos y conoce las mejores estrategias para afrontarlo.
Miedo a perder tu trabajo: conoce las causas
El miedo a perder tu trabajo puede aumentar tu estrés y producirte daños físicos considerables. Muchas son las causas que pueden provocarlo, te resumimos algunas:
- Perder la estabilidad financiera: trabajar en lo que nos gusta y percibir ingresos con los que podamos cubrir nuestras necesidades básicas, es lo que todos deseamos; por tal motivo, cuando existe la posibilidad de que nos despidan, es inevitable sentir que nuestra situación económica puede verse comprometida.
- Temor por lo desconocido: nos acostumbramos a nuestros trabajos, al entorno y al equipo con el que compartimos a diario. Nos da pánico enfrentar nuevas responsabilidades, porque no sabemos si lo haremos bien o si cumpliremos con las expectativas del empleador. Preferimos quedarnos con lo que ya conocemos, aunque a veces nos genere malestar.
- Creer que todo lo que tenemos es producto de la suerte: en este caso, dudamos de nuestras cualidades y le atribuimos a la suerte los logros que, a lo largo de nuestra experiencia, hemos alcanzado, lo que aumenta el deseo de permanecer en nuestros mismos puestos.
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¿Cómo superar el miedo a perder tu trabajo? Sigue estas estrategias
Sabemos que, ante la posibilidad de quedar desempleado, los nervios estarán a la orden del día. Por eso te nombraremos algunas estrategias y técnicas efectivas, para que tengas una mayor confianza en ti mismo y gestiones de la mejor manera tus emociones. Aquí un listado con las 9 mejores:
1. Identifica la emoción
Préstale atención a la ansiedad que sientas cuando ocurra un hecho como el que hemos descrito. No intentes ocultarla o eliminarla. Ten en cuenta que la mejor forma de abordar este tema, es enfrentándolo, siendo conscientes de lo que sentimos.
Muchas veces dejamos que pensamientos negativos se apoderen de nosotros y afecten nuestra salud, hasta el punto de perder el sueño y la paz mental. Pregúntate, ¿por qué crees que puedes ser despedido? ¿Hay indicios de que esto en verdad pueda ocurrir o solo se trata de algo sin bases?
2. Controla la fuente de estrés
Si al hacer el ejercicio anterior, descubres que la preocupación que sientes se debe a comentarios erróneos o fuentes malinterpretadas por parte de tu grupo de trabajo, comienza a filtrar la información que recibes, para que evites pasar por horas de angustia innecesarias.
Verás cómo cambia tu estado de ánimo luego de identificar el foco que te perturbaba. No olvides que la idea es ser realista, no imaginarse escenarios catastróficos que, lejos de sumarte bienestar, te generen inquietud.
3. Habla con tu jefe inmediato
Otra estrategia que puedes aplicar, si aún tienes miedo de perder tu trabajo, es conversar con tu supervisor o jefe inmediato. Pregúntale si hay alguna razón por la que debas temer y aprovecha la ocasión para proponer algunas iniciativas interesantes que sumen valor a la organización. La idea es que vea en ti las ganas de seguir creciendo y aportando conocimientos.
Además, esta conversación puede servir para que te proporcione ciertos datos que te permitan gozar de mayor seguridad laboral.
4. Sé positivo
Cuando somos positivos, nos enfocamos en el lado placentero de la vida y, al mismo tiempo, calmamos nuestras ansiedades. Una técnica efectiva que puedes poner en práctica es agradecer por todo lo bueno que tienes, comenzando por la salud.
No dejes que las situaciones de estrés te dominen. Concentrate en todo lo que te dé alegría, destaca lo valioso que eres y el que mereces grandes cosas, porque tienes talento y habilidades.
5. Busca oportunidades de mejora
Al identificar nuestras habilidades, también podemos detectar si dentro de nuestras funciones diarias debemos mejorar o potenciar alguna de ellas. Por ejemplo, los tiempos de entrega o la comunicación. Este ejercicio nos permite darnos cuenta de si estamos fallando y no lo habíamos notado, porque sentíamos que todo estaba bajo control.
También puedes pedirle consejo a un colega con mayor experiencia o cursar una especialización en tu área, para fortalecer tus destrezas en la organización.
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6. Establece un plan financiero
Otra opción que puedes llevar a cabo cuando sientas miedo de perder tu trabajo es la de contar con un plan financiero, que te dé cierta estabilidad en caso de que llegase a ocurrir el despido.
Una buena forma de hacerlo es ahorrando parte del sueldo que percibes en la empresa y disminuyendo los gastos innecesarios. Lo importante es que puedas contar con ese dinero que logres guardar, para que al momento de buscar empleo en otro lugar, no te sientas tan estresado durante ese proceso.
7. Toma un tiempo para ti
El trabajo nos proporciona bienestar económico y emocional, pero también puede ser fuente de estrés si no buscamos un espacio para nosotros mismos, en el que podamos disfrutar las actividades que más nos gustan.
Por eso, te recomendamos agregar a tu rutina diaria todas esas cosas que te generen placer, como cocinar, ver una película, compartir tiempo de calidad con tu familia o amigos, entre otros. Esta es una buena forma de consentirte y brindarte herramientas que te hagan sentir más feliz.
8. Busca otras alternativas
Si las sospechas que tienes son seguras o solo no te sientes satisfecho, porque no eres bien valorado en el puesto que ocupas en la organización, es hora de que actualices no solo tu CV con las principales habilidades que tienes, sino también tu perfil en LinkedIn.
Sabemos que seguro sientes angustia porque desconoces cuál será tu futuro inmediato, aun así, no te detengas y busca otras opciones. Quizás estás perdiendo la capacidad de crecer en otros lugares por no atreverte a dar ese paso.
9. Confía en tu talento
No te atormentes con pensamientos negativos y cree en ti mismo. El “qué pasaría si llego a cambiar de trabajo” no tiene que ser un motivo para tener dudas o incertidumbre. Piensa en las posibilidades que tu área te brinda, en la capacidad que tienes para adaptarte a todas las situaciones, por muy difíciles que estas sean.
Perder un trabajo puede resultar una experiencia complicada, en especial cuando no tienes otra opción disponible, pero nunca olvides que los cambios siempre vienen acompañados de algo mejor.
No sientas miedo, ¡disfruta el proceso!
No permitas que se genere un círculo vicioso de ansiedad. Identifica si hay verdaderas señales para estar preocupado; si no hay razones legítimas para tener miedo a perder tu trabajo, relájate, pero continúa dando lo mejor de ti. Si tus sospechas son ciertas, entonces refuerza tus pensamientos positivos y comienza a ver otros panoramas.
Recuerda que el cambio puede ser una oportunidad para hacer cosas nuevas y descubrir todo ese potencial que tienes dentro de ti.
