Buscar la mejora continua es una actitud de personas exitosas. Pues no importa cuan buenos seamos en lo que hacemos, siempre hay maneras de ir un poco más allá. Si tienes interés en mejorar tus habilidades de ventas, seguro es porque cumplir con las metas comerciales no es suficiente para ti. Creemos que lo que quieres es sobresalir como vendedor y desarrollar una carrera triunfante.
Esta no es una lista más de habilidades de un vendedor. Estos son consejos para que lleves a otro nivel esas habilidades que ya conoces y hacen parte de tu rutina y trabajo. Nuestro propósito es que comprendas que como vendedor también debes venderte, para poder cerrar un negocio. De eso se tratan estos tips, de hacerte brillar desde el primer contacto con tu futuro cliente.
1. Causa una excelente primera impresión:
Comenzar una relación con pie izquierdo es ponerte un obstáculo a ti mismo. Entonces, asegúrate de iniciar todas tus relaciones comerciales con el pie derecho. ¿Cómo? Confía en ti, mantén la calma, y muéstrate tal como eres. Además, presta atención a estos detalles:
- Tu presentación personal. No se trata de vestir de corbata o a la última moda. Se trata de representar a la marca con tu presentación, que se refleje coherencia entre lo que eres y lo que haces. Procura ser el reflejo de tu marca y producto.
- Tu aspecto físico en general. Cuídate, duerme bien, haz ejercicio y come saludable. Todo esto te hará lucir bien, con energía y vitalidad.
- Tu mirada. Mantén el contacto visual. Es una señal de confianza y seguridad.
- Tu sonrisa. Esta puede ser una tarea difícil, para algunas personas o circunstancias. ¿Te imaginas andar sonriendo mientras vendes seguros funerarios? Por eso, este consejo debes implementarlo como algo natural y espontáneo. Nunca fuerces una sonrisa, pero úsala siempre que lo veas conveniente. Es un rompehielos fabuloso.
- Tu preparación. Estudia a tu cliente, sector, competencia y todos los factores que puedan surgir en tu conversación. Sería un grave error llegar a improvisar en el primer encuentro. En su lugar, es un gran acierto demostrar tus conocimientos desde el día 1.
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2. Sé servicial
Eres un comercial, no un encargado de servicio al cliente. Eso está claro. Sin embargo, tu amabilidad, hacer un favor no pedido o brindar una ayuda adicional pueden generar una conexión más cercana con tu prospecto.
Esa es una gran estrategia para mejorar tus habilidades de ventas. Ya sabes que hablar del producto con insistencia, buscar al prospecto solo para indagar si ya tomó una decisión o desaparecer una vez se cierra la venta, es una falla. Servir al tiempo que vender es fidelizar. Eso es invaluable para un buen vendedor.
3. Construye y cuida tu reputación
En otras entradas te hemos hablado de la importancia de conocer a la perfección tu producto o servicio a la hora de salir a venderlo. Pues bien, cuando te especializas en eso que vendes vas construyendo una reputación y con eso vas ganando la confianza de los clientes.
Si te posicionas como un experto en el sector de tu marca (puede ser de manera autodidacta o con cursos), hablar de tu solución será pan comido. Así, lograrás persuadir más fácilmente a tus prospectos, conseguirás recomendaciones y, en definitiva, aumentarás tus ventas.
4. Modera tu lenguaje corporal
Sabes que vender se trata de comunicar, ¿cierto? Sabes que tu cuerpo comunica tanto como tus palabras, ¿verdad? Entonces consigue una coherencia entra ambas cosas, para proyectar seguridad y confianza.
Darás un mensaje más claro si tu gesticulación o movimientos son acordes a lo que dices. Controla el movimiento de las manos, no hagas gestos exagerados o de desaprobación, no osciles si estás de pie (mantente firme pero relajado). Estas son algunas cosas que puedes revisar de tu lenguaje corporal, pero si te grabas, podrás encontrar más detalles por corregir y mejorar tus habilidades de ventas.
5. Aprende a modular tu voz
¿Qué es modular la voz? Es hacer variaciones en el tono, la velocidad y otros factores del sonido al hablar. El consejo acá es que modules tu voz según las circunstancias, para que puedas transmitir emociones mientras hablas.
Por ejemplo, si tu cliente es de edad avanzada querrás hablar despacio, pero si es un muchacho podrías hacerlo con más agilidad. Si vendes paquetes turísticos será conveniente usar un tono enérgico, si vendes servicios de desarrollo web funcionará mejor un tono neutral.
6. Sé siempre honesto
Encuentra en tus debilidades opciones de mejora, y no motivos para engañar a un cliente. Aceptar que tu producto o servicio no responde a lo que te piden es encontrar una oportunidad para innovar.
Es mejor perder esa venta, en lugar de dañar tu reputación, recibir criticas (en redes sociales) y cargar con la conciencia de que estás haciendo las cosas mal. Para contrarrestar esto, puedes pedir plazos para presentar versiones optimizadas o dar alternativas. Anticipa respuestas y evita problemas.
7. Sé tú mismo
Cuando eres autentico, logras conexiones inesperadas con los demás. Es importante que reconozcas el valor de esas conexiones. También que recuerdes siempre que primero debes ser una buena persona y luego un gran vendedor. Entonces si te identificas con tu marca, crees en lo que vendes y eres fiel a ti mismo, marcarás una diferencia en lo que haces como vendedor.
Mejorar tus habilidades de ventas es una tarea diaria
Convierte en un nuevo hábito la tarea de mejorar tus habilidades en ventas. Para eso debes trabajar día a día en ajustar estos pequeños detalles.
Reiteramos: ser un gran vendedor no significa cumplir metas comerciales y salir a descansar. Ser un gran vendedor significa ser una mejor persona por ti y tus clientes, encontrar motivación en lo que haces, generar conexiones e impacto positivo en los demás. Estas son cosas que no se consiguen en un abrir y cerrar de ojos. Son una misión de vida.
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