Cada vez más empresas y emprendedores deciden contratar trabajadores independientes. En algunos casos, porque necesitan a un experto que pueda ofrecerles una visión nueva y objetiva. En otros, porque no cuentan con instalaciones ni materiales, y los autónomos suelen contar con sus propios recursos. Sea cual sea el caso, llega un momento en que se requieren sus servicios.
Y, aunque la mayoría de las veces la relación con los freelancers se desarrolla sin ningún inconveniente, en ocasiones se cometen errores al contratar que pueden hacerte perder tiempo y dinero. Veamos cuáles son algunos de estos desaciertos.
1. Contratar cuando estás en un aprieto
Sí, aunque suena contradictorio, contratar a alguien cuando estás corto de tiempo y bajo presión es una mala idea. Con las prisas, es probable que termines con un perfil que no está apto para el proyecto, lo que puede retrasarte en lugar de ayudarte.
En ese sentido, se recomienda no esperar a que la necesidad de un profesional sea urgente, sino comenzar a planificar su contratación. Para ello, determina las tareas que necesitas que realice, el proceso de selección de candidatos, así como un trabajo de prueba. De este modo, si surge un proyecto grande, ya sabrás a quién acudir.
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2. Contratar el servicio con las tasas más bajas
No vamos a mentir, es tentador, en especial, si se trata de una empresa o emprendimiento que apenas comienza. Sin embargo, hay un viejo refrán que dice “lo barato sale caro” que se puede aplicar a la contratación de freelancers. Es muy raro, por no decir imposible, que el autónomo con las tasas más bajas ofrezca resultados positivos.
Por ello, lo recomendable es que pruebes con los tres estándares, bajo, medio y alto, y evalúes sus habilidades, ya que también podría existir la posibilidad de que ese trabajador independiente sea alguien experimentado que está comenzando en este mundo y desea construirse una reputación.
Así mismo, en este último caso, debes considerar que a largo plazo el profesional puede aumentar sus tarifas, por lo que no está mal estar dispuesto a pagar un poco más si se trata de un desempeño de calidad.
3. No tener expectativas claras
Cuando no tienes claros cuáles son tus objetivos, no importa si tienes a un profesional capaz, aparte de exigirte una dirección no se sentirá cómodo cumplir con el encargo, solo porque no sabe qué dirección tomar. Considera ser transparente, practica la comunicación abierta y deja la posibilidad de contactarte por si necesita que se le aclare algún punto.
No tener expectativas definidas es un error que no querrás cometer, después de todo, perderás tiempo y dinero. Tanto tú como el autónomo caminarán en un círculo vicioso.
4. No pagar o responder a tiempo
Necesitas fidelizar autónomos, sobre todo si concluyes que el talento que has contratado tiene buenas habilidades. No pagar a tiempo es un adiós comprensible del profesional, de la misma forma que no responder de inmediato.
En el último caso, ten en cuenta que la mayoría de los trabajadores independientes tienen muchos compromisos a la vez, por lo que no lo tomarán muy bien si hay un proyecto que se extiende más de lo esperado solo porque no respondes sus mensajes.
5. Desconfiar de que hará un buen trabajo
Si quieres evitar caer en la lista negra de los freelancers, este es uno de los errores que debes evitar al contratar. Cuando desconfías de sus habilidades, lo notarán de inmediato y, en algunos casos, harás que duden de su desempeño y no te entregarán un trabajo donde hayan puesto todo de sí, sino cargado de incertidumbre.
Además, puede suceder que el trabajador por cuenta propia se sienta ofendido y limitado, por lo que no querrá volver a hacer negocios contigo. Recuerda que también tenderías a la microgestión en cuyo caso, no ahorrarás tiempo.
Los autónomos siempre esperarán que al final de una entrega se realicen comentarios y correcciones, así que no te preocupes demasiado. Confía desde el inicio en su profesionalismo y en la calidad de los resultados.
6. A todo le das la prioridad de urgente
Los trabajadores independientes aprecian a los clientes que saben fijar expectativas no solo claras, sino también realistas. Esto incluye las prioridades de las tareas. No incurras en el error de hacer que todas las asignaciones sean urgentes, sin importar si son pequeñas o grandes. En lugar de recibir un trabajo más rápido y eficiente, comprometerás la calidad y la relación con el freelancer.
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¿Te preguntas por qué tus relaciones con los autónomos duran poco y suelen terminar mal? Podrías estar incurriendo en algunos errores a la hora de contratar freelancers que te llevan a terminar en su lista negra. Sigue nuestras recomendaciones y cambia el final de la historia.