¿Anhelas alcanzar el éxito, independientemente de lo que eso signifique para tu vida? Aunque no hay fórmulas mágicas, ni un libreto o proceso específico, para llegar allá, queremos decirte que es posible. Si incorporas a tu rutina los hábitos de una mujer exitosa, día a día, te acercarás a ese estado de satisfacción y felicidad.
¿Qué hacer para ser una mujer exitosa?
Cada mujer puede percibir el éxito de una manera particular: para unas será ocupar cargos importantes en alguna empresa, mientas para otras ser madres o emprendedoras; también podría ser acumular riqueza o por el contrario lograr vivir cómoda en la austeridad. ¿Dónde te ves tú? Si aun no lo sabes, toma el tiempo que requieras para definirlo. Ese es el punto de partida, y no hay prisa.
De cualquier forma, los hábitos que te presentamos a continuación aplican para todas, pues a la larga no son más que conductas para trabajar en tu bienestar.
1. Dedícate a eso que te hace feliz
Dedicarnos a aquello que nos hace felices, además de ser un privilegio, es encaminarse hacia el éxito. Las cosas o tareas que nos dan felicidad suelen estar asociadas a nuestros gustos, pasiones y talentos; vivir conectada con ellas disminuye la frustración, el aburrimiento, y el cansancio. En pocas palabras, da un sentido especial a tu vida.
Sabemos que no todo es color de rosa y muchas no tienen ese privilegio. Para ellas acá está el secreto: entre los hábitos de una mujer exitosa está dedicarle, cada día, un momento a aquello que la hace feliz. Será un espacio valioso, para conectarse con sus pasiones y escapar de la rutina. Inyectarás a tu vida motivación y alegría.
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2. Invierte en ti
Tú eres tu mejor y principal inversión. Así como cuando se remodela una casa, antes de salir a gastar dinero, piensas si arreglarás la cocina o los baños, si comprarás muebles nuevos para sala de estar o un juego de alcoba; cuando se trata de invertir en ti, solo tú sabes qué necesitas para ser tu mejor versión.
Las mujeres exitosas invierten en sí mismas. Esta práctica las ayuda a trabajar en su autoestima y a creer en su potencial. No se trata solo de identificar debilidades para corregirlas; pues al reflexionar sobre eso, también salen a la luz sus fortalezas.
Cuando inviertes en ti, puede ser con formación, tiempo para el autocuidado (hacer ejercicio, ir al médico) o algo tan simple como un cambio de look, potencias tu autoestima y confías más en lo que puedes lograr.
3. Descansa
Las mujeres exitosas dedican tiempo suficiente a su descanso. Trabajar 20 horas al día no garantiza el éxito ni es equivalente a ser productiva. Por el contrario, sí asegura ojeras, mente nublada y hasta mal humor.
Para, lee un libro que te guste, mira una serie o película, sal con amigas, medita un poco, o duerme. Lo que te funcione está bien, lo importante es parar. Dale tiempo a tu mente y cuerpo para recuperar energía y continuar. Ten siempre presente, que un buen hábito de descanso se evidenciará en tu salud física y mental.
4. Sé generosa
El verdadero éxito da la claridad para comprender que la vida no es una competencia constante, y que dar también es gratificante. Compartir aquello que ha conseguido gracias a su esfuerzo es uno de los hábitos más impactantes de una mujer exitosa. Esta acción brinda una sensación de plenitud inigualable y eso es parte del éxito.
Puedes medir tu éxito por la cantidad de dinero, títulos, poder, amor o experiencias que has acumulado. Incorpora a tu vida el hábito de multiplicar todo eso, compartiéndolo con generosidad y de manera desinteresada. Tus conocimientos, tiempo, recursos, aquello que esté en tus posibilidades dar, se te retribuirá con toda seguridad.
No en vano, el proverbio que reza “más bienaventurado es dar que recibir” ha trascendido a los negocios, y se ha convertido en un práctica ejemplar de la gente exitosa.
5. Celebra tus logros
¡Felicítate! ¡Aplaude tus pequeñas victorias! Todos tus triunfos (grades y pequeños) son importantes. Eso lo saben las mujeres exitosas. Ellas no necesitan la aprobación de otras personas, porque tienen claro que la validación primordial es la de ellas mismas. Celebrar cada logro es la forma de expresarlo.
No sientas vergüenza. Nada tiene de malo sentirte orgullosa y estar contenta con las cosas que vas consiguiendo. Si cada día luchas por tus sueños, pues entonces, ¡brinda por ti cada día!
6. Agradece
La gratitud es un sentimiento muy poderoso: te permite ver el lado positivo de las cosas y enfocarte en lo que tienes; en consecuencia, te genera felicidad. Por eso, agradecer es un acto infaltable en la rutina de una mujer exitosa, y debería serlo para todas las personas.
Sin importar qué tan bueno o malo haya sido tu día, incorpora a tu rutina un momento para dar gracias (a Dios, al universo, a ti, a tu pareja, al vecino, a quién lo merezca…). Tendrás jornadas en las que va a costarte encontrar ese algo o alguien para agradecer, pero recuerda que incluso en la adversidad puede haber una luz.
Comienza por agradecer una cosa diaria, y procura cada día aumentar ese número. Cuando menos pienses, será natural llevar a tu mente todo lo bueno y positivo de tu vida. Eso te dará fuerza para afrontar problemas, carencias o dificultades. Eso te ayudará a ser una mujer exitosa.
7. Ten claros tus objetivos y marcha hacia ellos
Cerramos nuestro listado con esta práctica, pues ninguno de los hábitos de una mujer exitosa tendrá impacto a largo plazo si no se tienen los objetivos claros.
Para llegar al éxito, debes saber dónde está. Y ya hemos dicho que ese lugar es diferente para cada mujer, por eso debes trazar tu propio camino. Identifica tus talentos, pasiones, necesidades y deseos, encuentra un punto en común entre ellos y así irás marcando tu ruta. No avances, sin norte. Así, en realidad, no avanzarás.
Cuando fijas objetivos claros, concretos y realizables, sabes hacia donde avanzar y, en el camino, puedes obtener pequeñas victorias que te motivarán y ratificarán que vas bien.
Parte complementaria de este hábito es diseñar un plan de acción. Puedes iniciar preparando una lista de tareas con fechas, para organizarte y optimizar tus recursos (tiempo, conocimientos, habilidades, dinero, u otros). Y por supuesto, el hábito no mostraría resultados si no se toma acción. De nada sirve un planeador muy lindo sobre el escritorio, si no lo desarrollas, ¿de acuerdo?
No lo olvides, para llegar a la meta, debes marchar hacia ella.
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ME GUSTA EL CONTENIDO DE LA PUBLICACION, HACE MENCION DE PUNTOS MUY ESPECIFICOS QUE AYUDAN A TENER EN CUENTA COMO SE PUEDE LOGRAR TRABAJAR EN UNO MISMO.
¡Hola! Jenny. Muchas gracias por tu comentario y por apreciar nuestro contenido. Nos alegra saber que encuentras útiles y específicos los puntos que mencionamos en la publicación.