Si tienes problemas para concentrarte y quieres ser más productivo, es posible que el deep work te ayude. Esta modalidad de trabajo se basa en lograr un estado de concentración profunda a través de cuatro pilares fundamentales. De esta manera, podrás evitar las molestas distracciones del día a día, finalizar tus tareas de manera rápida y efectiva; y gestionar tu tiempo con mayor precisión.
Si quieres saber más del deep work y cómo puedes ponerlo en práctica desde tu casa, oficina o cualquier lugar de trabajo, te recomendamos seguir leyendo este artículo. Te mostraremos cuáles son estos cuatro pilares fundamentales para lograr este estado de concentración y de qué manera ejercitarlos.
¿Por qué no nos podemos concentrar?
En la actualidad muchas personas encuentran difícil poder concentrarse en una tarea. Ya sea que te encuentres en tu hogar o en la oficina, es muy probable que al menos una cosa interrumpa tu concentración mientras trabajas: puede ser una notificación de WhatsApp del grupo familiar o de tu grupo del trabajo, la conversación cercana de tus compañeros, tus hijos preguntándote algo, o los ruidos por fuera del lugar donde trabajas.
Incluso tu propia mente puede distraerte al recorrer hilos de tareas pendientes o recordar cosas que te preocupan de forma constante. Como lo hemos visto, tenemos distracciones externas e internas y no es fácil sortearlas todas para poder enfocarnos en una sola cosa, en especial en un mundo lleno de información como en el que vivimos ahora.
Nos hemos acostumbrado tanto a la multitarea y a dividir nuestra atención, que dar nuestro máximo de concentración para un solo trabajo resulta complejo. Esto a la larga termina afectando nuestras relaciones personales y también nuestro desempeño laboral. Según un estudio de la Asociación Americana de Psicología, una persona puede perder hasta el 40 % de productividad con la multitarea.
Asimismo, un informe de Udemy y Toluna reveló que las 5 distracciones más frecuentes en las oficinas son:
- Hablar con compañeros.
- Los ruidos de la oficina.
- Sentirse abrumado por los cambios en el trabajo.
- Las reuniones.
- Las redes sociales.
¿Cuántas veces revisas las redes sociales durante tu jornada laboral? Las distracciones son muchas, pero no todo está perdido. Bajo este paradigma nace el concepto del deep work, promulgado por el profesor de Ciencia computacional de la Universidad de Georgetown, Cal Newport. Según este experto, concentrarse y evitar las distracciones optimiza nuestro rendimiento laboral es posible. Ahora te explicaremos cómo.
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¿Qué es el deep work?
Traducido como “trabajado a fondo”, el deep work es la capacidad de concentrarse de manera consciente y focalizada en una tarea que requiere un constante esfuerzo mental, a pesar de las distracciones. Newport, creador del concepto, señala que es una habilidad muy rara de encontrar y difícil de ejercitar, pero no imposible. Para empezar a trabajar el deep work, es necesario que replanteemos nuestras prioridades y que el trabajo en cuestión se convierta en la principal.
Si logramos concentrarnos como debe, Newport promete que lograremos resultados en la velocidad y la calidad del trabajo. Asimismo, nos permite conocer con mayor profundidad una situación y si se trata de un problema, podremos pensar maneras más eficientes y creativas para resolverlo.
Productividad
Un estudio de la Universidad de Machala en Ecuador, relaciona el aumento de productividad con el deep work. Los investigadores relacionaron hábitos de esta modalidad de concentración profunda, como “priorizar actividades”, “establecer procesos” y “desempeño exclusivo” con la reducción de errores en el trabajo, el cumplimiento de objetivos y la mejora de los tiempos de entrega.
Newport reveló en una entrevista con Trello que una vez que te conviertes en un disciplinado del deep work, “comienzas a darte cuenta que las actividades superficiales—las tareas pequeñas, correos electrónicos, reuniones—no inclinan la balanza hacia ningún lado” y empiezas a pensar en las tareas y trabajos que realmente marcan una diferencia. Aquello que genuinamente es productivo.
Características
De acuerdo con Newport, el deep work:
- Juega con la alternancia entre trabajo superficial (tareas pequeñas) y el trabajo profundo.
- Se entrena, requiere un grado de voluntad y persistencia por parte de quien quiera disciplinarse.
- Logra que repensemos los hábitos que consideramos productivos y el concepto mismo de productividad, de manera que nos demos cuenta de que hacer varias cosas en el día no es “ser productivo”, sino solamente estar atareado.
- Te permite pensar el sentido de tu trabajo: ¿por qué haces lo que haces?
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Pilares del deep work
Para poner en práctica el deep work, Newport ha definido cuatro pilares sobre los que tienes que trabajar.
Persistencia
Trabajar a profundidad no es fácil y peor volverlo una parte de tu cotidianidad. Solo se puede lograr si se practica y se tiene persistencia hasta poder observar los resultados. Es necesario crear una especie de rutina: define dónde trabajar, cuándo, cuánto tiempo y mecanismos para sostener este trabajo. Confiamos en que tu disciplina te guíe y logres dominar esta habilidad.
No des paso al aburrimiento
Hay que entender que el deep work no significa vivir aburrido y saber valorar los tiempos de ocio. No debes dedicarte todo el tiempo al trabajo profundo, ni dejar de lado tus hobbies y actividades. ¿Te gusta jugar videojuegos? ¿Pintar? ¿Hacer ejercicio? Alterna tus hábitos de distracción de siempre con el deep work y verás como no te aburrirás.
Desconéctate de las redes sociales
Hoy en día es muy difícil estar un momento sin recibir notificaciones o querer chequear las redes. Sin embargo, no es imposible. Ya hemos establecido que las redes son de los principales distractores, pero existen mecanismos en celulares y dispositivos electrónicos que nos permiten concentrarnos mejor, tales como la opción de “no molestar” o desactivar las notificaciones.
Prioriza tus actividades
Hay veces en el que el trabajo superficial se convierte en nuestra prioridad. Nos referimos a las actividades que no requieren mucho esfuerzo cognitivo, ni tampoco tiempo o recursos. Es imprescindible que organices tus prioridades y que elimines el trabajo superficial lo más rápido que puedas, para poder dedicarle el tiempo adecuado al trabajo profundo.
Ahora que sabes de qué se trata el deep work y cómo puede volvernos personas más conscientes de nuestra productividad, ¿te animas a probarlo? Esperamos que este artículo te haya servido y que lo compartas con tus colegas o alguien que lo necesite.
