Encuentras una oferta de trabajo. Envías el currículum. Y nada. Un silencio sepulcral. Te comienzas a preguntar a dónde fue a parar tu hoja de vida. Allí, es cuando conoces el agujero negro del curriculum vitae: los sistemas ATS.
Los ATS o sistemas de seguimiento de candidatos se han vuelto los mejores amigos de los reclutadores. ¿La razón? La verdad es que son varias. Estos sistemas organizan las solicitudes de empleo, y una vez hecho, filtran y muestran a los candidatos más relevantes y calificados.
Es probable que estés pensado, “pero yo soy un candidato calificado” y te creemos. El error puede estar en que tu currículum no cumple con los requerimientos para superar a los robots. Así que te mostramos cómo hacerlo.
1. No envíes solicitudes a roles para los que no estás calificado
Hay quienes perciben a los ATS como “robots malignos” que se interponen en el camino de su búsqueda de trabajo. Sin embargo, estos sistemas solo están haciendo su trabajo, y van a descartar a aquellos que no cuentan con las habilidades básicas que se necesitan para el puesto.
En ese sentido, no malgastes tu tiempo, ni el del reclutador. Opta por puestos en los que estás calificado, de otra forma, es probable que la búsqueda se extienda y tu frustración se haga cada vez mayor.
Lee también: ¿Qué es un currículum funcional y cuándo utilizarlo?
2. No te postules a todas las ofertas que tiene una empresa
Aunque te digamos que no los odies, es probable que lo termines haciendo, ya que otra función de estos sistemas es mostrar a los reclutadores todas las ofertas a las que te has postulado. Y si has enviado tu currículum a todas las vacantes de la empresa, es probable que se cuestionen si tu interés es real o estás consciente de tus habilidades.
Por otro lado, ten en cuenta que esto no va a ocurrir con dos puestos similares, por lo que puedes aplicar a ambos. Del mismo modo, postúlate a dos puestos diferentes, siempre que tu currículum esté ajustado y tengas las competencias para ello. Eso sí, como te dijimos arriba, nada de hacerlo en todas y cada una de las ofertas de una empresa.
Al final, el reclutador puede asumir que no te tomaste el tiempo de leer y considerar lo que se necesita para cada uno de los roles, o que no desconoces cuál es el adecuado para ti.
3. Incluye las palabras claves correctas
Los ATS leen tu currículum como lo haría un reclutador; es decir, escanean buscando información relevante para determinar si eres compatible con el puesto. Por ello, cuando se trata de crear un currículum que supere los sistemas ATS, debes asegurarte de que cuente con las piezas claves de información y que estas sean fáciles de encontrar.
Estos sistemas funcionan un poco como Google, con todo eso de las palabras claves. Así, el empleador coloca algunas keywords relevantes para el puesto, ya sean habilidades, experiencia o rasgos, y estas son las que necesitas incluir en tu CV.
¿Pero cómo identificas estas palabras clave? Revisa la oferta de trabajo y busca aquellas habilidades que aparecen más de una vez, al inicio, el parte de requisitos y al final. Esto también depende del sector, ya que si tu profesión requiere una licencia, la palabra clave podría ser el título o la certificación.
Cuida, además, la forma en la que agregas las keywords, ya que, por ejemplo, puedes colocar “experto en Excel” y la palabra clave especificada sea “experiencia en hojas de cálculo” y seas rechazado. En estos casos, apégate a como se especificó en la oferta.
4. Vincula tus logros con las palabras clave
De nada sirve colocar un montón de palabras clave si estas no están sustentadas con logros o resultados. Por ello, a pesar de superar los filtros, puede que no recibas una llamada si no vinculas las keywords con tu experiencia y lo que eres capaz de hacer.
Del mismo modo, esta es una forma de diferenciarte de la competencia, ya que así como tú habrán otros que descifren las palabras clave y las agreguen a su hoja de vida, por lo que la diferencia estará en lo que has logrado con esas habilidades y rasgos.
5. Escoge .docx sobre .pdf
Aunque ames el formato .pdf porque mantiene intacto el contenido de tu currículum, considera que los ATS analizan mejor aquellos que están en .docx. Así las cosas, siempre escoge este formato sobre el anterior.
Ahora bien, si el reclutador solicita un formato en específico, sea este .pdf, por ejemplo, este es el que debes usar para tu CV.
6. Opta por la simplicidad
Vas a odiar esto, y aún más a los ATS. Pero hay algunos elementos de diseño que pueden dificultar el trabajo de estos sistemas y si no pueden extraer tu información a solo texto, como por lo general lo hacen, lo van a descartar.
Tablas, logotipos, gráficos, encabezados poco comunes, URLs son solo algunos de los que debes evitar. En su lugar, opta por negritas, cursiva, subrayado, viñetas y fuentes comunes, pero elegantes.
7. No intentes engañar a los ATS
Hay quienes en un intento de superar a los ATS buscan engañarlos, pero si lo consigues, recuerda que luego está la inspección de los reclutadores, los que serán inflexibles con este tipo de prácticas. En ese sentido, no intentes ningún tipo de artimaña, ya que puede perjudicar tu imagen y posibles contrataciones.
Descubre: Te contamos los motivos por los que un reclutador descarta un currículum
Buscar empleo es una tarea ardua, pero con algunos consejos puedes hacerla un poco más fácil y efectiva. ¡Consigue que tu currículum pase los sistemas ATS con estos trucos!