Por allá por 1996, Bill Gates utilizó la frase “el contenido es el rey” y, aunque existe un debate sobre si aún ostenta este puesto, las empresas continúan generando diferentes tipos de contenido como parte de su estrategia de marketing digital.
El contenido no solo permite a los usuarios encontrar una marca durante su navegación por Internet, sino que es vital para conectar a los negocios con sus clientes potenciales.
Así las cosas, no es de extrañar que con frecuencia se soliciten los servicios de un redactor. ¿Pero todos los escritores pueden generar todo tipo de piezas de contenido?
La respuesta es no, y un ejemplo de ello son los redactores de contenido y los copywriters. Si bien es cierto que hay muchos que creen que estos términos podrían ser sinónimos, la verdad es que tienen diferencias bien marcadas. Veamos todo al respecto.
¿Qué se entiende por redacción de contenidos?
El contenido creado por un redactor busca educar o entretener. Así mismo, debe ser de calidad y aportar valor a los usuarios. También podría intervenir en el proceso de ventas (¡y ayudar!), pero este no es su principal propósito.
Te mostramos algunos ejemplos de redacción de contenidos.
- Blog posts.
- Tutoriales.
- eBooks.
- Artículos de noticias.
- Contenido evergreen.
- Newsletters o boletines.
- Casos de estudio.
- Posts de redes sociales.
Lee también: Estas 6 herramientas te ayudarán como redactor de contenidos
¿Qué se entiende por copywriting?
Por su parte, el copywriter crea contenido que incita a los usuarios a realizar una acción vinculada con el proceso de ventas de un negocio. Por ejemplo, comprar un producto, suscribirse a un plan prémium o inscribirse a un curso.
En ese sentido, algunos ejemplo de copywriting incluyen los siguientes:
- Landing pages.
- Anuncios.
- Páginas de productos.
- Correos electrónicos para ventas.
- Copys de ventas.
Principales diferencias entre un copywriter y redactor de contenidos
Aunque te hemos adelantado un poco, llegó el momento de que veamos punto por punto las diferencias entre un copywriter y un redactor de contenidos.
El propósito
Como hemos visto, la redacción de contenido busca enseñar o entretener, y el copywriting destaca por persuadir para conseguir una acción.
Por ello, en una estrategia de marketing digital, el copywriter centra sus esfuerzos en que los textos de anuncios, landing pages, entre otros, persuadan a los lectores y, de este modo, conseguir una respuesta.
Por su parte, el redactor de contenido crea textos, ya sean blog posts, tutoriales, entre otros, que aportan un valor que no tiene porque ser comercial. Así, la mayoría de las veces suelen estar vinculados a la enseñanza o el entretenimiento.
La longitud
En general, los redactores de contenido crean textos más extensos que los copywriters. La razón es que puedes usar una o dos oraciones para incitar a los usuarios a realizar una acción. Sin embargo, si quieres enseñarles a hacer algo, por ejemplo, es probable que necesites una pieza de contenido más larga o no aportarás valor.
Las emociones involucradas
El copywriter apela a las emociones para obtener una respuesta. De hecho, el profesor de la Universidad de Harvard, Gerald Zaltman, asegura que 9 de cada 10 compras están vinculadas con la emoción.
Por ejemplo, el temor a perderse algo (fear of missing out o FOMO, en inglés) suele empujar a los consumidores a adquirir un producto o servicio, de modo que no se pierdan sus beneficios. Esto podría suceder, luego de ver que todos sus amigos están usando el producto en redes sociales.
Así mismo, hay muchas otras emociones a las que el copywriting apela, ya sea la gratificación instantánea, el sentido de pertenencia, la seguridad, comodidad, orgullo, entre otros.
El uso de la gramática
En la redacción de contenidos los errores gramaticales deben ser mínimos. Una falta puede interrumpir la lectura del usuario, y hacer que salga corriendo del sitio web.
En su lugar, el copywriting admite que la gramática no sea del todo perfecta, siempre que el texto logre su cometido: persuadir. Por ello, se pueden encontrar frases incompletas o que obvien algunas palabras o signos de puntuación. Después de todo, la mayoría de los formatos en los que escribe un copywriter suelen contar con un número reducido de palabras.
El SEO
Aunque ambas piezas de contenido se pueden posicionar, la redacción es más propensa a alcanzar posiciones más altas y, por ende, más tráfico. Esto se debe a que aporta valor a los usuarios, tiene una intención informativa y el texto es más extenso.
Descubre: Recomendaciones para redactar artículos optimizados para SEO
Ahora, ya conoces las diferencias entre un redactor de contenidos y un copywriter, decide qué dirección quieres dar a tu carrera y regístrate en WeRemote para impulsarte y obtener experiencia.
Por otro lado, si buscas a alguien que te ayude con los publicaciones de tu blog o con el texto de un anuncio, contrata al profesional indicado. ¡Regístrate en WeRemote como empresa y comienza a recibir las mejores propuestas!