¿Qué vender desde casa? 4 ideas para ganar dinero extra

¿Quieres ganar dinero extra? ¿Tienes un espíritu emprendedor? ¿Te interesa explorar y mejorar tus habilidades comerciales? Si te inquietan estas interrogantes, una solución práctica y fácil de ejecutar está en vender algo desde casa. ¿Pero, qué vendo?, te preguntarás… Pues bien, si aún no sabes cuál sería tu producto o servicio ideal, te presentamos algunas ideas que pueden desbloquear tu creatividad y ayudarte a ponerte en marcha.

4 ideas para vender desde casa

Aunque hay muchísimas cosas que podrías vender desde tu casa, nosotros hemos pensado en 4 categorías que las agrupan. No queremos hacer un listado infinito nombrando cada una de esas cosas, para que luego escojas la que te sonó más sencilla, la que más te llamó la atención o la que “crees” que se venderá más.

Queremos que estas ideas te lleven a estudiar la viabilidad de tu negocio según tus capacidades, entorno, prospectos, y más. No olvides que un emprendimiento no sobrevive solo de una gran idea, sino que exige un plan con objetivos, estrategias y acciones puntuales para concretarlo. Así las cosas, comencemos:

1. Productos artesanales o hechos a mano

Si tienes habilidades para las manualidades, eres artista o conoces un familiar o amigo con un talento semejante, tienes una oportunidad de negocio. Desde tejidos, hasta obras de arte y joyas, todo se vale si lo puedes manufacturar de manera estandarizada o bajo unos criterios de exclusividad que sean atractivos a los consumidores.

Ventaja: acá los hobbies y pasatiempos pueden darte una respuesta sobre cuál puede ser tu creación. Será algo que disfrutes elaborando y comercializando. En un sentido muy literal, ganarás dinero por hacer lo que te gusta.

Desventaja: asignar un precio a tu tiempo y talento es un asunto subjetivo, lo cual puede nos ser valorado correctamente por la mayoría. Necesitarás muchos más esfuerzos para conseguir leads y te costará más alcanzar las metas de venta.

2. Servicios

Transforma tu experiencia y conocimientos en servicios. En esta categoría puedes pensar en mentorías, asesorías, cursos, ilustraciones, redacción y corrección de textos y todo aquello que sepas hacer (desde casa) y puedas convertir en una solución para tus prospectos.

Si decides vender servicios desde casa, debes tener la certeza de que tu servicio concluirá con un beneficio tangible para tu cliente. Además, la recomendación en este caso es calcular bien tu disponibilidad de tiempo, para poder cobrar lo justo por la dedicación que vas a designar a este trabajo.

Ventaja: en primer lugar, el único insumo que necesitas es tu tiempo; es decir, que tu inversión inicial en términos de dinero será cero. En segundo lugar, entre más especializado quieras hacer tu servicio, más tendrás que capacitarte. Esta inversión también es una ventaja puesto que ese conocimiento adquirido te será útil no solo para vender más sino para otros aspectos de tu vida.

Desventaja: la exigente dedicación de tiempo puede convertirlo en un segundo trabajo, y debes estar dispuesto a asumirlo de esa manera (a menos, que sea tu emprendimiento de tiempo completo).

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3. Comida salada y dulces

Explota tus habilidades culinarias: estandariza recetas, productos y empaques, y ¡ponte a vender! Este es uno de los sectores con mejor potencial comercial para ofrecer desde casa. Tanto las comidas saladas como los dulces tienen un cliente esperando, pero la clave del éxito está en garantizar no solo un delicioso sabor, sino también la calidad.

¡Consejo adicional! Si te llama la atención incursionar en el mundo gastronómico: es importante anticipar una excelente logística de entrega, para asegurarte de que tus productos lleguen calientes o congelados (según sea el caso), frescos y en buen estado para consumir.

Ventaja: puedes vender bajo pedido y no necesitas inventario.

Desventaja: la cocina de tu casa puede ser insuficiente, si tu negocio es exitoso. Es probable que necesites tramitar permisos o certificados de sanidad, por ejemplo, para la comercialización de alimentos.

4. Revender productos

Esta es una alternativa fácil, rápida y cómoda para muchos. Se trata de comprar al por mayor los productos que quieres comercializar y luego venderlos desde casa a un precio que te genere una ganancia.

En este caso se debes contar con habilidades de organización y contabilidad. A diferencia de las anteriores ideas de negocio, en esta opción tendrás que hacer una inversión inicial en inventario y será importante tener claridad sobre sus variaciones. Además deberás calcular con cuidado aspectos como impuestos de importación, costos de envío, empaques, garantías, y otros gastos asociados, de modo que en efecto veas una ganancia a medida que vendes tus productos.

No pases por alto la validación de tus prospectos. No querrás gastar tu dinero y terminar con la casa llena de artículos que nadie quiso comprarte. Por eso, un plan de negocios claro, va a ser muy útil para prevenir pérdidas.

Ventaja: requiere poco esfuerzo.

Desventaja: requiere una inversión inicial y tiene riesgo de fracaso si no se elabora un plan de negocios a conciencia.

¿Qué más necesito para vender desde casa?

La tecnología, la virtualidad, el trabajo remoto, tu empuje y disciplina son los ingredientes perfectos para emprender un negocio y vender desde casa. Adicional a esto, necesitas una gran idea (arriba, ya te ayudamos con esto) y manos a la obra.

Todo lo que mencionamos es cierto, pero seamos francos: es muy romántico y tenemos que aterrizarlo. Por eso, una vez hayas decidido qué será aquello que venderás, valida los siguientes factores para asegurarte de que el negocio es viable.

• Elabora un plan de negocios: sin importar cuál sea tu producto o servicio, un plan de negocios te va a dar un norte, te mostrará la viabilidad del negocio, te presentará una proyección de retorno de inversión y mucho más.
• Analiza requerimiento de espacio: ¿Necesitas un taller, una cocina industrial, una bodega, un estudio? El hecho de vender desde casa tiene muchas ventajas y facilidades, pero también puede ser una limitante si no cuentas con los espacios que requiere tu emprendimiento.
• Analiza requerimientos de equipos e insumos: no es lo mismo hacer una torta para tu abuelita que para vender. No es lo mismo hacer una asesoría en video para los amigos, que para un cliente. El punto es que para hacer de tu idea un negocio exitoso requieres insumos y equipos que contribuyan a la estandarización y calidad de lo que vendes. Hacerlo desde casa, no significa que parezca para la casa.
• Estudia la normatividad: aunque al principio quieras vender desde casa solo como una forma de recibir dinero extra, es importante que te asegures de que no estás infringiendo normas en tu ciudad o país. Ojo, no necesitas legalizar el emprendimiento o tramitar permisos antes de hacer la validación mínima de tu idea. Sin embargo, si lo que buscas es construir un negocio exitoso, debes estar al tanto de esos asuntos.
• Promociona tu negocio: además de realizar experimentos y pruebas con conocidos y familiares, deberás planear las estrategias de promoción de tus productos o servicios. Sin duda el voz a voz te ayudará, pero no será suficiente. Nada se vende por sí solo, hay que darlo a conocer y conseguir leads.
• Inversión inicial: en algunos casos, como el revender artículos, necesitarás recursos para adquirir el inventario; si vas a vender empanadas, tendrás que conseguir los ingredientes; si vas a pintar un cuadro, deberás comprar el lienzo y los óleos, en fin… Mucho o poco, debes presupuestar un dinero que te de el impulso para arrancar.

¿Te animas a vender desde casa?

Ganar dinero extra no le cae mal a nadie. Por su puesto, lo normal sería que ese ingreso adicional, requiera un esfuerzo adicional. No hablamos de un sacrificio tremendo ni de una vida sin descanso. Solo te recordamos, que una idea, un negocio o un plan pueden sonar maravillosos, pero es el trabajo constante el que lo saca adelante.

Esperamos que encuentres inspiración en estas 4 ideas que te compartimos. Ten en cuenta que para elegir aquello que deseas vender es importante sacar ventaja de tus habilidades, conocimientos y pasiones, y tener presentes las limitaciones u oportunidades logísticas y financieras necesarias para llevarlas a cabo.

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